sábado, 29 de septiembre de 2012

¿y ahora qué?


Se le acabaron las páginas a esta libreta diabética, al mismo tiempo que el otoño incendiario amenaza con arrasar este año caníbal (que harto de tantos derroteros, sólo admite un si, por victoria)

Cada vez que me despido de un cuaderno, acostumbro a hacer balance de imaginarios, a éste, sin duda, le sobra la mierda que me han vendido en tarros de mil, por la que, lo juro, empeñé hasta mis carnes.

Deambulo por los andenes de mi intrahistoria ¿qué me ha quedado? Si hasta las vías se ríen de mí, oxidadas, podridas, oxidadas, podr… están tan maltrechas que nada concurre por encima sin descarrilarse en las curvas.

Ahora que me encuentro en escasos metros del precipicio generacional, que sólo unos meses me separan de él, y no sé por qué, pero me aferro ferozmente a blankaótica, la adolescente extravagante y solitaria, tan dispuesta a redimir sus incoherencias a base de nocturnidad y alevosía. A ratos aprieto su mano tan fuerte que no llega al rigor a los pómulos, me gusta mantenerla calada en cada charco, entonces muerta de miedo, me repito entre dientes,  que no me suelte, por favor, que no me suelte nunca. A otros se me escapa y me decido a dar el gran salto, dejar ya los tratamientos de acné, y empezar a estar más pendiente de las arrugas que traerá  el paso de las estaciones.

Nada es menos doloroso por natural que sea el cambio…

La marcha forzada de las “hadas” que prometían rastro tras de sí, cómo han huido todas y cada una de las de entonces, sin dejar pruebas siquiera de que alguna vez existieran…  pero existieron sí, rieron, comieron y bebieron conmigo hasta rendirse al cansancio, existieron bellas y temporales, efímeras, tan imposibles… y ahora ya no se acuerdan, las hadas no saben de penas, las hadas no quieren tener ni idea del dolor, de la herida, se hacen las sordas, a veces me dicen que estoy linda en las fotos, se resisten a aceptar la caída de mis alas, mis articulaciones rotas, las hadas no están cuando se las necesita…

Y ya me ahoga la oquedad que deja el eco en mi garganta, expandiéndose, infiltrándose metastásico cómo un tumor, silente, infectando todas las caricias de mi inventario con sarnosas ortigas. Cómo me escuece el corazón, deforme de recibir palos, cubierto de serrín para camuflar tanto olor a pérdida, primer clasificado en la categoría de pesos pesados en el cuadrilátero de las soledades.

Hace un frío atroz aquí dentro, y me siento desnuda, completamente desnuda en mitad de este inesperado paso a nivel sin barreras, ni llamadas a tiempo.

Hacia atrás, las páginas salmón de los periódicos, las latas de aluminio exhalando sus últimos brillos, bajo el encapotado pasado sobre la tierra yerma se arrugan anodinas.

De frente, un sol cegador me nubla la vista, todavía me produce lágrimas, el silbato de una desconocida mole se aproxima inexorable desde el este, el tiempo para pensar se decide en esta tierra, pero tienes que elegir ¿dentro o fuera?
Suspiro, va siendo hora de atarse los cordones,

correr, 

saltar,

decirle adiós. 



viernes, 28 de septiembre de 2012

réquiem preposicional



Instrucciones: taconea, da palmas,  cántala


Ante el ciprés que ayer,
bajo el color tensión de los cimientos
que me sustentan,
yo, me morderé la lengua,

con la guadaña que hoy,
recortaré los pies de mi alargada sombra,

contra el recuerdo de
tu sin-figura y muda,
yo, me morderé la lengua,

desde el momento en que,
en mi cabeza tú, sigas creciendo cruel,
entre las cicatrices de los tresmil fantasmas
yo, me morderé la lengua,

hasta que sangre hiel,
supure hiel,
vomite hiel,
hacia la ansiada purga,
hacia la dura yaga,
yo, me morderé la lengua,

para que duermas bien,
para que vivas bien,
por el reflejo del mismo espejo en que,
me reconozcas otra,
y según tu mundo diez
cargues con quien te bailara las coplas,
y mientras yo, me morderé la lengua,

sin que sospeches que,
cuando al anochecer se abran las tumbas,
sobre la tierra fiel,
sin que te des ni cuenta
arrojaré los restos
de tu terrible sombra,
y después, me morderé la lengua,

con la esperanza iré tras el olvido
a suplicarle que, de mi conciencia él,
te dé salida,
entonces yo, me morderé la lengua,

y durante que el pulmón, me deje a toda voz
vivir en en paz,
dormir en paz,

mediante el modo de felicidad,
seguro encontraré
cómo perderte ya,
sin que me duela más
tu inútil falta,

que este callar tan mío,
que este golpear tan bajo,
que este punto y final,


que este haberme mordido tanto.


antes de que me quieras, cómo se quiere a un gato
me largo con cualquiera que se parezca a tí



27 de Septiembre de 2012

jueves, 27 de septiembre de 2012

Raíces negras



A Julio Arce, 
por sus fantásticas clases de
Música Popular Urbana


No hay tierra sin pueblo, puede haber pueblo sin tierra: La música conforma las naciones
Peter Welles

Esta es la idea que Peter Welles defiende en la conferencia sobre la música popular cómo pilar de la identidad americana.
Estados Unidos es la tierra del nuevo mundo, sus mitos son muy diferentes a los que se honraba en la vieja Europa. El tren, la construcción de esa red de arterias que comunicaron la costa Este con el romántico Western, a manos de manos negras, que encontraron en la música una vía de escape a esa condición de esclavos. Fueron los afroamericanos quienes enseñaron a América a reírse hasta de su mala suerte, quienes entretuvieron a su burguesía desde los Ministriles, o a no pisarse los pies bailando un rag time capaz de convertir el tiempo musical en jirones. Hasta la presencia del banjo, icono del cine del Oeste, es herencia negra.

Por todo esto, no es de extrañar que las primeras canciones narraron la vida de estos, allá por 1896 con un todavía desconocido Stephen Foster.

La Edad Dorada de la música popular norteamericana tiene su estandarte en la ruidosa Tim Pan Alley, aquella calle “de la cacerolada” era un hervidero de letristas y compositores que hacían un ruido infernal 25 horas al día. La llamaron la calle de las canciones, y los más célebres músicos que la afinaron fueron judíos, se decía que para comprender América tenías que viajar primero a Rusia.
En la música judía hay cómo en el blues una lágrima, un grito, esa capacidad de reírse de la mala suerte de la vida. Los judíos fueron los nómadas que empezaron a conformar país, cambiaron incluso sus nombres por otros americanos, porque para ellos, la religión era América.
Con el lanzamiento de “The Jazz Singer” Al Jonson que era judío y black face, solía decir “el jazz es la música de los judíos interpretada por los negros”.

A finales del siglo XIX, periodo de grandes descubrimientos, cómo la luz eléctrica, el gramófono, el cine… surge la primera generación de compositores y letristas, George Gershwin, Jorome Kern, Paul Robson…
Al jazz le siguió el blues, y a este el boggy boggy, un tipo de música que parecía el ritmo de un tren. Con los felices años ’20 llegó el Charleston, y la liberación femenina de las “flappers girls”. Se escribieron shows para Brodway y se consolidaron las Big Band.

Todos estos reconocibles símbolos con sabor a libertad, que poco a poco han ido haciendo nación al otro lado de las aguas, y que nos recuerdan, que el sueño americano es en realidad una bandera de muchos más colores.

martes, 18 de septiembre de 2012

y barrer el querer con los pelos de un pincel


 Quieto parao' no te arrimes, ya son demasiados abriles,
para tu amanecer desbocao' mejor que me olvides
(Corazón de mimbre, Marea)

Abril arrasó insolente los campos dónde las semillas que escogí con mimo esa primavera,
llegó huracanado con hoz en ristre contra mis brotes,
me tiró del pelo y dolorido se marchó dando un portazo tras de sí,ndo un portazo tras de smarch
que hizo temblar las paredes, desde dónde se desprendieron con  el impacto, los primeros pétalos agrietados de la rosa eterna, presagio que anunció cambios:
¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡!!!!!!!!


Abril me arrancó las lágrimas de cuajo, me apuntó en la sien, y muy tranquilo, me preguntó altanero:

-          - ¿Él o yo? –  al tiempo que comprobó que el silenciador estaba bien activado.

Concretó el duelo a oscuras y además pidió el beneficio de las máscaras para preservar así su intimidad, lástima que a mí las gomas me dejaron marcas.

Me brindó un tiempo, cómo sólo saben hacer los sádicos amantes, un tiempo de recapitulación y de meditación, igual que un estudiado paso atrás,
tiempo lleno de sospechas y dudas que llevé a peor, que alargó exponencialmente los pies de abril.

Por entonces, el insomnio se acurrucó en forma de profundas ojeras indisimulables, tras los posos del café, cómo dos pozos de negrura acordonando el perímetro de la tristeza, que después tornó de resignación mi rostro de escarabajo, que cubrió mi alma, pálida cómo un cigarro, de sombras.

Dejó los bosques encapotados, imposibilitados ese abril.

Me sustituyó por un estío más cruel que cualquiera, ocupado y agobiado, cómo sin quererlo nos fuimos dando largas para a-cortar distancias, sin darnos cuenta nos relevó un desenlace más vulgar que desconocido, tan propio de ese mes.

Y al final, se fue, y para rematarme, me tiró dos besos cómo dos machetes, cómo dos cazas asesinos,  sin esperarlo, el mismo día en que sobrecogidos, recordábamos desde este lado, el símbolo de un Occidente devenido a escombros, conspiración, hinchado de tanta muerte.

Y al igual que entonces una mano negra, fue tirando suavemente del manto de las confusiones,
cubriéndolo todo, precisamente, de “eso que llaman olvido”




sábado, 15 de septiembre de 2012

Hoy ¡Poesía a gritos!


Copio y pego del blog de Antonio Díez, mañana todos a las fiestas de Fuenlabrada seeeeeeeee, la última vez que estuve aquí fue viendo tocar a Mägo de Oz, Breed77 y Katatonia, que recuerdos, gotiqueando por estos lares, mañana más y mejor, no faltéis

Este sábado participaré en un recital enorme llamado “¡POESÍA A GRITOOOOOOS!” organizado con motivo de las fiestas de Fuenlabrada por la asociación CCK Kanete y el Mesón Kiebro, sin duda el local de referencia en estos tiempo oscuros en mi oscura ciudad…

Y no habrá poesía únicamente, también música y otras sorpresas. Y no estaré solo: más de veinte artistas de toda laya desparramarán sus propuestas en la noche. Estos son:

presentan: ANA RODRIGO / YOLIDÚ GLU GLU
música: JAVIER MOLERO / MAXI

intervienen:

YOFRE LUNA
CECIL FERNÁNDEZ
DARTH HERRERO
MAX ESTRELLA
ANTONIO DÍEZ
MAR HACHE
EL CABLE AZUL
ALICIA AVILÉS
FÉLIX CHACÓN
NIÑO
BOLO GARCÍA
NARES MONTERO
CARLOS GUERRERO
ÁNGEL MUÑOZ
NORA LOUKILI
KIKE ROSQUILLA
MAR RODRIGO
JULIO QUÉ MÁS DA & CREW

Nos vemos en la plaza del poniente a las ocho de la tarde. Va a ser apoteósico. Y después, allí mismo, concierto de Iratxo y otras muchas historias que sólo suceden en las fiestas de Fuenlabrada. ¡Para no perdérselo!


martes, 11 de septiembre de 2012

Rebeldes sin causa (propia)

Pequeña reflexión en la biblioteca tras un descanso con Carlos Saez, desde el cansancio del estudio

Errantes meditabundos de Occidente, vosotros, todos vosotros, soñáis con vivir la utopía oriental que sólo el Dharma ofrece a los más puros, habláis vosotros de libertad con las cadenas prietas, y os habéis currado una gran pancarta de Rebeldía que endulzáis con yerba buena y el humo que se desprende de la filosofía de la calle adulterada.
No os creo, ni comparto vuestra propuesta, vosotros, todos vosotros, desconocidos del mismo mundo que criticáis airadamente porque os ahoga y esclaviza. No creéis en nada ni en nadie, y emprendéis la huida fácil, que es la de la casa materna, cobades todos vosotros, para mí no sois revolucionarios, ni originales.
Siento que todos no seais un Jack Kerouac, cosa que de verdad lamento, ni un Alexander Supertramp, cosa que más bien celebro, por vosotros, digo.
Es fácil despegarse cuando tenéis una cobertura favorable, renegar así de la mano que os da de comer, abrazar las enseñanzas de un célebre Budha, etéreo, en muchos casos igual de desconocido, pero que os ha prometido el Nirvana a través del arte.
Sublimáis la uotopía literaria y os cansáis de todo rápido. Sigo viendoos repletos los bolsillos de tabaco norteamericano y bebiendo Mahou en cualquier parte, el Jack Daniels sigue siendo para unos pocos privilegiados, usáis Facebook, vosotros, todos vosotros, estáis sobreinformados, pero aún así os considero hipócritas cuando renegáis de Coca-Cola.
Por eso no creo en vuestro caballo entre las eternas dos tierras, porque veo cómo en vez de equilibrar la balanza, la destronáis con una suerte de fantasías noveladas que no llegan a sus últimas consecuencias.
Así que genios, todos vosotros, admito que me ofendéis tanto cómo la injusticia o el terrorismo.
Expertos relativizadores del todo, quiero veros a vosotros, todos vosotros, felices en Cuba o en paz en el Tíbet.
Occidente no os deporta, este exilio vuestro, todo vuestro, es la elección de tener un pie en cada sitio, indeciso e indispuesto a saltar definitivamente del otro lado del espejo. Niños estancados en Nunca Jamás ¿es qué ninguno está dispueso a ser un Peter Pan ó un Capitan Garffio? eso requiere esfuerzo, y perdonad mi osadía, yo lo sé, y por eso me quejo, desde la formación, el sacrificio y la constancia, puedo decirlo, ME QUEJO.
Tranquilos, porque todavía hay tiempo, despegaz con el mejor de los carburantes que se os ocurra y patead la mierda de este lado con las mejores botas, la educación, no hablo sólo de la academía, pero tampoco sólo de la moral.
Sin embargo os admiro, poetas, todos vosotros, dueños de la belleza, almas sensibles y bondadosas, por eso escribo, porque os creo a tiempo, de cambiar ese conformismo, tan de vosotros. Y cuando digo conformistas es porque todavía no he conocido ni a un Ernesto Guevara ni a un Bukowski cualquiera.
La lucha empieza siempre con uno mismo, empapaos ahora que sois jóvenes y fuertes de todo cuánto os caiga, buscad la manera de combatir desde dentro con lo mejor de cada uno, para la evasión siempre habrá tiempo.
Os deseo fervorosamente a todos un proyecto de futuro feliz, que os haga triunfadores, sin pensar que eso sólo sea sinónimo de Jaguar en la puerta, o Dom Perignon en la nevera.
Le falta solidez y consistencia a tanta milicia barata, le falta humanismo, cojones y trabajo ("las estrellas para quién las trabaja"  dice Mestre).
Así que vosotros, todos vosotros habitantes del hoyo de este lado del meridiano, enjugaos el miedo con las legañas cada mañana y empezad por forjaos Hombres y Mujeres vosotros mismos,
seguid creando, poetas, que la belleza puede ser la primera milla de todas las que recorren esta autopista.
En el mejor sistema no existe la palabra miedo, ni humano rima con vago.

domingo, 9 de septiembre de 2012

en el Sur no hay vírgenes



A Jack , Chuck & Barry, por darme tanto , tanto, tanto


Ariadna tiró del hilo
una noche de agosto estrellado,
no sé si le picaba tanto
más el vestido
o la goma de las bragas,
pero cansada de tantos rezos
a San Pancracio & la Virgen de la Fortuna
se apretó las ligas
al tiempo que desclavó
sus manos de la cruz
que tanto le pesaba,
desenfundó un viejo Colt 9,
herencia del reciente cadáver
de un jazzman
que pactó con el mismo diablo
una muerte de gramófono,
& acogiéndose
a la protección de todos sus nahuas
se borró las lágrimas en los ojos
con el vidrio de una botella de agave azul,
& descerrajó en el corazón
de su prometido tres balas:

en el nombre del padre

del hijo

& del espíritu santo,

Esa noche de agosto estrellado
cuando llegó a casa
brindó con un Old Fitzgerald de 15 años,
recuerdo del último secuestro en Kentucky,
se desnudó de cara al espejo
& después de masturbarse
con la imagen de Robert Mitchum
en La noche del cazador
entonando el célebre Leaning Leaning
hasta durmió tranquila,
no pensó nada más.
A la mañana siguiente
un flamante Chevrolet Malibú del 65
aparcó frente a su apartamento
a las 7.43,
Cord Cuervo, natural de Cabo San Lucas,
hijo de un célebre
corredor de apuestas de Obregón
& de la popular telepredicadora
Cassie Esperanza Refrito, inmigrante en Oklahoma,
se alisó su  impecable traje beige
de raya diplomática,
encendió el primer Paul Mall del día
& esperó,
pendiente de que Ariadna
no cayera en que cada día
le faltaba más pelo,
que él disimulaba bajo
un elegante Stetson marrón.
A las 7.53, la señorita
salió del 32 de la calle Amanecer Ballenas,
tras unas enormes gafas de sol
& una sugerente falda lápiz rojo intenso
que acentuaba sus curvas
de mujer puñal,
tal cómo habían acordado.
Cuervo la besó timidamente en los labios
al tiempo que abría la puerta del auto,
sólo dijo:
-         ¿Has traído lo de Santos? –
a lo que ella sonriendo respondió
señalando su Birkin de Hermes
de cocodrilo del Nilo.
Arrancaron
levantando una polvareda
sobre los coletazos del verano
en Rancho Cerro Colorado
& tomando la carretera Federal 19
a Bahía de Concepción
fueron dejando atrás la BC
digno lecho para indios
& amantes pobres,
en el coche música country,
tarareaban canciones de
Dolly Parton & Bill Monroe
entre los secaderos de tabaco
que enmarcaban los andenes,
Ariadna era feliz así,
¿Qué futuro podía ofrecerle un
humilde jardinero de Todos Santos?
en realidad ella pensaba
haberle hecho un favor,
siguió tarareando
al tiempo que se agachaba
sobre el regazo de Cuervo,
& se repasaba los labios
cómo a él le gustaba,
- chica lista Ariadna -
Llevaba a cuestas tanta violencia
que a veces hasta le
sangraban los sueños,

pero sabía cómo tratar a cada hombre

& éste tenía el dólar sujeto por la cola,
& eso es más eficaz
que una ametralladora.